Entrevista a Omar Felipe Giraldo
Traducción del francés de la entrevista realizada para la revista Terrestres por Pierre Madelin a Omar Felipe Giraldo
La reciente elección de una izquierda aliada con las luchas feministas y antiextractivistas fue un acontecimiento político trascendental en Colombia que despertó esperanzas en todo el mundo. Con el filósofo colombiano Omar Felipe Giraldo, repasamos esta victoria y los retos a los que se enfrentará.
El 19 de junio, al mismo tiempo que Francia elegía su nueva asamblea, un terremoto político sacudió América Latina. Colombia no sólo ha elegido a un presidente de izquierdas por primera vez en sus 200 años de historia republicana, sino que le acompañará en el ejercicio del poder Francia Márquez, una activista afrocolombiana y feminista que ha demostrado su valía en política en la lucha contra la minería. Al proponer el fin de la explotación petrolera en su territorio y al situar la defensa de la vida en el centro de su programa, Gustavo Petro también ha despertado el entusiasmo en los círculos ecologistas.
1) ¿Quiénes son Gustavo Petro y Francia Márquez y cómo llegaron a unirse para ganar la presidencia?
Son dos figuras que vienen de las entrañas populares. Francia Márquez, es una mujer afrocolombiana que trabajó en la minería artesanal y como empleada doméstica. Defensora de un río y desplazada por la violencia. Ganadora del Premio Goldman (conocido como el nobel de medio ambiente) por su lucha en contra de la minería ilegal. Gustavo Petro, es un ex guerrillero del M-19, que se hizo conocer por sus denuncias sobre las relaciones paramilitates del gobierno de Álvaro Uribe por las cuales se encarcelaron a sesenta senadores y congresistas. Alcalde de Bogotá y líder social más importante de las últimas décadas.
La alianza de estas dos figuras se dió cuando Francia Márquez aceptó la invitación de Petro a realizar una consulta para escoger al candidato del Pacto Histórico (coalición de sectores de izquierda y centroizquierda creada para las elecciones al congreso y para las elecciones presidenciales). En esas elecciones Francia, de manera sorpresiva, alcanzó la tercera votación entre todos los candidatos, por encima de políticos del establecimiento, lo que obligó a Petro a nombrarla como Vicepresidente. En realidad él estaba buscando alianzas con la centro derecha, porque calculaba que iba a alcanzar a ganar solo con sus bases. Dado que no pudo llegar a acuerdos y debido a la presión de su movimiento y la opinión pública, invitó a Francia como su fórmula vicepresidencial.
Para mí ese fue el momento en que la campaña dio un giro fundamental, pues las bases estaban desanimadas porque se pensaba que se haría una desagrabable alianza con politiqueros tradicionales del partido liberal. Pero no. Francia llegó y le dió un espiritu que la campaña no tenía. Cientos de miles de jóvenes, empezaron a hacer trabajo hormiga por todo el país, desmitiendo mentiras, haciendo pedagogía, hablando con la gente, convenciendo indecisos. Esa fue la clave que permitió a esta dupla conquistar un triunfo histórico, pues es la primera vez, en los 200 años de historia republicana del país, que la izquierda logra acceder al poder presidencial, con la mayor cantidad de votos de toda la historia.
2) ¿Cuál fue el itinerario político de Francia Márquez y qué representa su acceso a la vicepresidencia en un país como Colombia?
Francia Márquez viene de los movimiento sociales, el ambientalismo y la defensa de los derechos humanos. Su camino político hasta ahora no había sido el institucional, sino el la política de los territorios en contra del extractivismo, la guerra y el racismo estructural. Su vicepresidencia representa muchas cosas, pues nunca antes se pensó que una mujer afrocolombiana, de las clases más oprimidas de la sociedad, de la Colombia profunda, y feminista, llegará a un puesto como ese.
Debe tenerse en cuenta que en Colombia las élites siempre han gobernado y mantenido el poder político. Podríamos decir, para efectos de síntesis, que toda su historia política puede resumirse en la alternancia entre dos partidos: el conservador y el liberal, ambos de la derecha. Aunque asumen distintos nombres, en realidad son estas facciones de las élites las que, hasta este triunfo electoral, mantuvieron por dos siglos la hegemonía del país.
Esto, en cierta medida, explica porque Colombia lleva sumido en una guerra crónica de 50 años que ha dejado alrededor de 500 mil muertos. Como dijo el Padre de Roux, presidente de la comisión histótica de la verdad, si guardáramos un minuto de silencio por cada homicidio en nuestro conflicto, nos quedaríamos en silencio durante 17 años. Solo como contexto: un partido de izquierda, la Unión Patriótica (UP), durante la década de los 80 y 90 fue literalmente exterminado por agentes del Estado, paramilitares o narcotraficantes. Mataron uno a uno a 5000 mil de sus miembros. Y durante las dos décadas de este siglo el poder político estuvo encarnado en el movimiento político de Alvaro Uribe: un presidente de la ultraderecha fascista al que se le atribuyen 6402 asesinatos de jóvenes inocentes que fueron disfrazados como guerrilleros para engrosar las cifras de su política de guerra total contra la insurgencia : el llamado escándalo de los «falsos positivos» Es a esa clase de poder al que se le arrebata el poder político. De ahí la importancia de este triunfo.
3) Eres filósofo ambiental y Francia Márquez solicitó tu apoyo para su campaña. ¿En qué medida pudiste contribuir a ella?
Mi aportación fue marginal. La busqué cuando a ella se le ocurrió la « descabellada » idea, a fines de 2020, de ser presidente del país. A ella le interesó mucho que yo tenía mi residencia en el epicentro del movimiento zapatista en Chiapas. Quería conocer el proceso de Marichuy : una mujer indígena mexicana que fue vocera del Consejo Indígena de Gobierno en la última campaña a la presidencia de México. Para Francia, Marichuy era su referente más inmediato, por su similitud como mujer racializada y proveniente de sectores populares que se había aventurado a una esfuerzo semejante. Con Francia pudimos hacer una traducción para el contexto colombiano del Mandar Obedeciendo zapatista. Con su equipo del Soy porque Somos se elaboró una propuesta denominada mandatos populares, la cual pretendría construir un plan nacional de gobierno mediante asambleas populares en territorios rurales y barrios urbanos. También aporté en la construcción de la política agroecológica.
4) ¿Qué importancia tiene la ecología política y la defensa de la vida y de los territorios en el programa de Gustavo Petro y Francia Márquez ?
Una diferencia enorme de la propuesta política del presidente Gustavo Petro es que es el primer progresismo ambientalista en toda la región. Su apuesta es construir un proyecto político centrado en la vida. Su eslogan de campaña fue : « Colombia, potencia mundial de la vida ». La idea central es sacar al país de las economías extractivistas, como el carbón y el petróleo, hacer una transición energética, y apostar por economías productivas, territorializadas y descentralizadas. Aunque en mi criterio, existe todavía mucha confusión con el tema de las energías renovables y el discurso se inscribe en un capitalismo verde que puede ser muy peligroso, creo que al menos es la primera vez que un gobierno se plantea en serio dejar de explorar petróleo y transitar hacia una economía de menor consumo energético.
5) Cuando te conocí, tu apuesta política giraba en torno a la construcción de la autonomía desde abajo, a distancia del Estado. ¿Cómo es que años despúes, aceptaste sumarte a una campaña electoral enfocada a la conquista del poder de Estado ?
Sigo pensando que la política más importante, la que más importa, la hacen los pueblos a escalas pequeñas, en procesos singulares de auto-organización. La política pequeña, la más conservadora, es realizada por el sistema político formal de las repúblicas, cada vez con menos margen de maniobra, con inercias más poderosas, y sin capacidad de abstenerse de reproducir el entuerto civilizatorio en el que estamos. La política más interesante responde a otras formas no estatales, muy menospreciadas por los estadocentristas, pero que son las que han dejado de creer en la salvación del mesías y se han puesto, en cambio, a tomar la iniciativa, a resolver sus propios problemas a partir de la autoorganización y el autogobierno, a crear comunalidad, a inventar soluciones creativas.
A pesar de esta convicción también pienso que no podemos ignorar lo que ocurre en la esfera de la política institucional, porque claro está, no son lo mismo unos gobiernos que otros. El ascenso del neofascismo de los últimos años nos lo ha dejado bien claro. Un bombardeo, una represión militar o paramilitar, pueden borrar cualquier empeño promisorio. Colombia, como ejemplo, es el país con mayor número de líderes sociales en el mundo. Es casi imposible construir autonomía en un escenario como estos.
Creo que en la política no hay salidas completamente coherentes, y de alguna manera es necesario abrir luchas en varios frentes. Mientras exista el Estado es necesario disputarlo para abrir ciertas grietas. En algunos aspectos como el acceso a la tierra el Estado constituye un ente al que no podemos renunciar. Sin embargo, aun creo que es necesario saberse distanciados, como actores críticos de la burocracia estatal. Soy escéptico de que el leviatán estatal sea el principal objetivo de las luchas políticas al que toque dirigirse. Pero eso no implica que debamos seguir dejando el espacio institucional a las élites como ha ocurrido durante dos siglos en Colombia.
6) ¿Qué papel tuvieron los movimientos sociales y el ciclo insurrecional colombiano de 2019-2021 en esta victoria? ¿Cómo evitar traicionarlos o domesticarlos en el ejercicio del poder ?
Durante 2019 y 2020 existió un estallido social inédito en Colombia. Cientos de miles de jóvenes salieron a marchar, motivados por el hartazgo de las políticas impopulares del gobierno de Iván Duque y del régimen uribista. Durante dos meses seguidos los jóvenes estuvieron en las calles, cantando, haciendo arte, realizando asambleas, marchando con pancartas y bailando. Esa protesta pacífica fue infiltrada por la policía para legitimar el uso de la fuerza. Nunca antes había existido una represión como la que vimos el año pasado: 5800 casos de abuso de represión policial, incluyendo 80 homicidios, abusos sexuales, disparos a los ojos, desapariciones, y un largo etcétera. Para mí es gracias a esos jóvenes que hicieron la explosión social más inspiradora de los últimos años que se ganó la presidencia. Al igual que en Chile, ellos fueron los que hicieron la campaña, puerta a puerta, de manera voluntaria.
Sin embargo, acá entra mi dosis de realismo. No será posible evitar traicionarlos, por lo menos a los más anticapitalista. Desarrollar el capitalismo fue de hecho una promesa de campaña reiterada en el primer discurso de Petro como presidente. Y en este aspecto hay que recordar que despúes de tantos años de transformaciones estructurales de orden neoliberal y la emergencia de organismos supranacionales, grandes corporaciones, instituciones económicas, militares y políticas supranacionales, y conglomerados mediáticos, los Estados-nación perdieron su potencial de transformar de forma radical estructuras económicas, redistribuir a fondo la riqueza y cambiar el modelo político burgués. Hasta hace un par de generaciones el Estado-nación había sido el medio privilegiado para las conquistas sociales. Pero hoy es apenas una escuálida caricatura de lo que fue y de lo que desde allí puede hacerse para los fines de los movimientos anticapitalistas.
Además a esta presidencia le estallará la crisis alimentaria, la crisis energética que ya están viviendo en Europa, y la crisis económica global, como resultado de la invasión de Ucrania, pero también por las fallas estructurales del capitalismo globalizado. Las élites y los medios fieles al establecimiento, que en Colombia son casi todos, culparán a Petro y provocarán nuevas revueltas. No está en manos de ningún gobierno cambiar una crisis estructural del capitalismo. Aun así, una cosa es que esta crisis sea gestionada por las derechas insensibles y otra por un gobierno de corte popular.
7) En un país tan desigual y violento como Colombia, con una historia tan dolorosa, ¿Cuáles van a ser los principales retos de la nueva presidencia, y que fuerzas adversas, tanto sociales, políticas o geopolíticas, va a encontrar en su camino?
Petro ganó la presidencia con una cancha inclinada en su contra. Triunfó a pesar de la inmensa guerra sucia de prácticamente todos los medios de comunicación. Y así tendrá que gobernar. También tiene que emprender cambios con una estructura jurídico política construida para mantener el privilegio de las élites y con una subjetividad colectiva profundamenta neoliberal. Gobernará además en una crisis de violencia por grupos criminales y la amenaza permanente de reagrupación de ejércitos paramilitares que seguro amenazarán con sembrar terror en territorios donde se intenten hacer transformaciones que pongan en cuestión la propiedad privada latifundista.
Su principal reto será responder a las inmensas expectativas que despertó en los sectores populares. Una vez en funciones, se dará cuenta de las inmensas limitaciones que tendrá, por los acuerdos programáticos que deberá hacer y por la necesidad de tender puentes con las oligarquías para tener gobernabilidad, lo cual domesticará su agenda hasta llevarla al centro del espectro político. La realpolitik al final se le impondrá a pesar de sus promesas de campaña, como ha ocurrido con todos los gobiernos progresistas de América Latina.
8) No es la primera vez en la historia reciente de América latina que accede al poder una fuerza política que pretende luchar contra el extractivismo y defender la « Madre-Tierra » mediante una personalidad salida de las bases sindicales e indigenas (pienso en particular en el caso de Evo Morales en Bolivia). Sin embargo, y pese a innegables avances sociales, no pudieron contener las dinamicas ecocidas del capitalismo. Algo permite pensar que el gobierno de Petro y Marquez sera mas exitoso en este sentido ? Acaso no corremos el riesgo de una nueva desilusion como la que ya se siente en el Chile de Boric ?
Debemos moderar nuestras expectativas. Hemos visto que los regímenes progresistas, como los que han llegado a ocupar el gobierno en América Latina tienen, en lo esencial, vedada la posibilidad de ir en contra de la reproducción de capital. El mismo Petro lo reconoce abiertamente. ¿Qué significa eso ? Que no pueden ir en contra del crecimiento económico ni de la propiedad privada ni de la inversión de capital. Se pueden hacer algunas regulaciones como la prohibición al fracking, se intentará suspender la exploración petrolera, y otras reformas, pero veo muy dificil ir en contra del agronegocio, la ganadería extensiva, la minería a gran escala, y me preocupa que se le apueste a las energía eólica y fotovoltaica de una manera tan centralizada y corporativizada que acabe creando problemas similiares a los que enfrentan pueblos en otras latitudes donde se han instalado estos megaproyectos.
A pesar de todas estas prevenciones, creo que estaremos en una mejor situación en comparación con los gobiernos previos, y creo que este triunfo no es de Petro ni de Márquez ; es de los sectores populares movilizados que sueñan con inventarse un futuro más digno para sus pueblos, hasta que, como dice Francia : la dignidad se haga costumbre.